La Ruta del Vino Ribera del Duero abarca municipios de cuatro provincias: Burgos, Segovia, Soria y Valladolid. Cuenta con 21.000 hectáreas de viñedo plantado y más de 250 bodegas donde se embotellan casi 50 millones de litros de vino. Se sitúa en pleno corazón de la Península Ibérica, en Castilla y León. Ribera es vino y gastronomía, es cultura y tradiciones, es monumentos con siglos de historia, es gente con estilo propio.
El enoturismo en auge
En “Castilla y León Es Vida” también se presentarán el enoturismo y la gastronomía como el producto estrella de la región. Y los datos lo demuestran: la Ruta del Vino Ribera del Duero ha recibido un 35% más de visitantes que el año pasado. A pesar de la crisis, el sector está capeando la situación debido al aumento de turistas, así pues; sigue siendo líder en el turismo de interior y manteniendo la fidelidad de los turistas que vienen y repiten, gracias a que la diversificación de la oferta se ha incrementado.
El enoturismo está en auge, esto se debe, en parte, a que los españoles deciden viajar a destinos más cercanos y, en este sentido, la Ruta del Vino Ribera del Duero se encuentra en un lugar estratégico (en el centro del territorio español). Los catalanes son los principales turistas que optan por su oferta enoturística, representando un 33,18% del total de visitantes, seguidos por los valencianos (16,82%), los andaluces (10,19%) y los madrileños (8,06%.